Opera prima del director Danés Gustav Möller.

Llegué a este film por casualidad. Cuando miré la fecha de estreno, vi que fue de 2.018 y no podía creerme que se me escapara en la gran pantalla. Algo que me fastidió, sinceramente lo digo.

El protagonista, Asger Holm, un oficial de policía, que ha sido suspendido temporalmente de sus funciones y relegado a operador del servicio de emergencias.... pasará una noche que no olvidará.

Esta cinta de único escenario, me ha resultado de lo más interesante. La historia me ha atrapado por completo. Los diálogos, bien construídos. Hilados a la perfección. Cuando se oye la voz rasgada de Asger y de la última persona que llamó al puesto de Holm. Pone literalmente los pelos de punta. Suelen decir los policías y los deservicios de emergenicas, que nunca se acostumbran por muchas situaciones de tensión que vivan, tener que oír y ver en primera persona, cosas desagradables.

Este oficial, hace lo imposible por ayudar a quien está detrás de su auricular con microfóno. Palpando la angustia, de no saber qué pasa al otro lado del hilo telefónico, en los momentos de silencio. Que a mí personalmente me han dejado sin palabras. Pues es cómo si yo atendiera esa llamada. 

No cabe duda que el cine Danés, es impecable. Tiene títulos impresionantes y siempre es un disfrute ver películas de la talla de "La caza", con Mads Mikkelsen o la trilogía de "Los casos del departamento Q".